Tu Mundo es lo que Percibes

        Soy una persona de tener muchos amigos y con una cara que mantiene siempre una sonrisa. La mayoría de las personas que me conocen están muy felices conmigo porque no tengo limitación para entablar una amistad. A veces conozco personas que no se llevan bien entre ellos, pero soy amigo de ambas partes. Les digo”¿qué me importa los asuntos entre ustedes? Soy amigo tuyo, y también amigo de él.”  De esta manera, no faltan personas quienes dicen que soy buena persona, pero también hay otros que opinan lo contrario. Sin embargo, frente a estos comentarios simplemente río y continúo mi vida. El psicólogo y escritor americano Wayne Dyer dijo una vez en el libro Tus Zonas Erróneas (Your Erroneous Zones): "Solo los perros muertos no reciben patadas". Aunque también me importa lo que los demás piensen de mí, no es propio de mí vivir bajo esa sombra.

        Debido a que cada uno tenemos diferentes percepciones, muy pocas personas ubicadas en los dos lados de la disputa sienten que son el lado equivocado, porque cuando me cuentan la historia la culpa siempre la tiene el otro lado. De hecho, no me importa mucho la autenticidad de la historia, lo que me interesa es por qué la percepción de un mismo asunto, que experimentan las dos partes, es tan diferente. A excepción de algunos amigos que son mentirosos por nacimiento, la mayoría de las historias que las personas me cuentan son verdaderas. Sin embargo, es una verdad que existe cierta particularidad en estos casos ya que los hechos van acompañados de sentimientos personales. Yo no soy la excepción, reflexiono que yo soy así también al narrar una historia que he vivido desde mi propia experiencia.

        Nunca ha habido una historia absolutamente verdadera en este mundo, e incluso los detalles de quienes la han experimentado no son del todo creíbles. Hace algunos años, el conductor del programa CCTV, Cui Yongyuan inició un proyecto de investigación llamado "Historia oral", lo cual era muy significativo. Teóricamente es más creíble cuando los testigos dicen lo que han vivido, desafortunadamente, diferentes personas suelen tener narraciones muy diferentes del mismo acontecimiento, especialmente cuando se trata de testigos de dos lados opuestos. Alguien entrevistó una vez a los combatientes chinos, norcoreanos, surcoreanos y estadounidenses que participaron en la Guerra de Corea. Al describir la misma batalla, el enfoque de cada uno era diferente, como si se tratara de una película con diferentes versiones, lo cual suena muy interesante.

       Desde la pandemia de Covid-19, el mundo se me ha vuelto cada vez más desconocido, e ignoro cada vez más si mi cognición está lista para seguir el ritmo de los cambios en este mundo. Alguien me preguntó por qué no escribo más artículos sobre los temas de la actualidad y política que vivimos. En primer lugar, no creo que mi nivel de reflexión haya alcanzado una agudeza penetrante sobre la esencia de los problemas; todavía necesito estudiar mucho más para enriquecer mi experiencia de vivir y comprender la profundidad de la iluminación Zen en esta apreciada vida. En segundo lugar, será blanco fácil de ser cabeza cortada por especular la Santa Voluntad. ¡No me jodas!

      ¿Qué diablos es el mundo? Como mortal, no tengo la forma de ver realmente el cuadro completo. Cada uno de nosotros tenemos una percepción unilateral de lo que se puede tocar, así como el ciego quiere saber cómo es un elefante, pero ¿quiénes se atreven a decir que el mundo que conocen o describen es, efectivamente, el mundo real? Todos tenemos nuestra propia opinión, pero el mundo sigue funcionando a su manera.

Chengzun Pan