Punto de Encuentro

DESCENTRALIZACION, ¿QUO VADIS?

Por: Period. Wilberth Vilca Laura (*)

La descentralización en nuestro país transita por el su decimosexto año de implementación, en un contexto de crisis de gobernabilidad, y con un ejecutivo asumido por el Presidente Manuel Vizcarra, ex-gobernador regional de Moquegua y su premier Cesar Villanueva, ex-gobernador de San Martín, podría encontrar el mejor contexto socio-político para su relanzamiento. El renunciante presidente PPK, había ofertado implementar el “Ministerio de Apoyo a las Regiones” (MAR) en la denominada “Cumbre de la Descentralización” celebrado en el Cusco, en junio de 2016, previo a la asunción del mando, sin embargo la oferta fue archivada, y en su reemplazo impulso los llamados “Gore-Ejecutivo”, reunión del ejecutivo con los gobernadores regionales, celebrando 7 sesiones, la última reunión extraordinaria convocada por el presidente Vizcarra, fue el 16 y 17 de abril, con el propósito de agilizar la inversión pública en materia de salud, educación, vivienda, transportes y la reconstrucción del norte. Consideramos que el mensaje del premier Villanueva dará en el Congreso de la Republica, en busca del voto de confianza debería priorizar el tema de la descentralización, su fortalecimiento y profundización. La reciente información oficial del INEI y su Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO), que revela un leve rebrote de la pobreza monetaria por primera vez en el milenio actual, a nivel nacional se ha incrementado un punto porcentual, y en el caso del Cusco, nada menos que subió 4.9%, de 20.4% en el 2016 a 25.2% en el 2017, lo que significa que un total de 335,603 cusqueños se encuentran en situación de pobreza, esta noticia debe significar la alerta y compromiso de los tres niveles de gobierno para tener eficacia en la gestión pública, combatir frontalmente la corrupción y focalizar y mejorar los programas sociales. Sin embargo la gran reforma del Estado que es la descentralización, tiene propiciar una agenda regional que implique por lo menos lo siguiente: la modernización del Estado con énfasis regional, el gobierno abierto y la transparencia, promover el gobierno electrónico, repotenciar el CCI (Consejo de Coordinación Intergubernamental), promover incentivos para la conformación de mancomunidades que a su vez propicien las auténticas macro-regiones, referente a los mecanismos de control, ante la proliferación de la corrupción, se debe empoderar a la sociedad civil y sus comités de vigilancia, dándoles más potestades y que sus acuerdos sean vinculantes, los alcaldes y gobernadores actúan con excesiva discrecionalidad, mientras regidores y consejeros no cumplen con su deber y labor fiscalizadora, ceden fácilmente a las prebendas de los gobernantes de turno. El presupuesto general no puede seguir siendo centralista, se debe reducir el 75% que dispone el ejecutivo en favor las regiones y municipalidades, promover un programa intensivo de fortalecimiento de capacidades a nivel sub-nacional. A nivel político tenemos pendiente una reforma política, que no se reduce a la bicameralidad, antes bien se debe renovar por tercios o mitades el parlamento, suprimir la impunidad, y fortalecer los mecanismos de rendición de cuentas y democracia representativa, los partidos políticos y los movimientos regionales y locales merecen una reingeniería para reencontrarlos con el sentir ciudadano. El bicentenario de la república y la gobernabilidad del país lo exigen, unidos todo lo podemos.

(*) Email: ideasayni@gmail.com

 

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