Punto de Encuentro

Un tsunami golpea a la izquierda europea

Después de casi de tres décadas de existencia, el bloque de la Unión Europea empieza a mostrar fisuras, y amenaza con desplomarse como la Cortina de Hierro, en la década de los noventa. Pero a Bruselas lo único que parece importarle, por el momento, es la posición de los países disidentes, respecto al tema de Rusia y Ucrania, al margen de la actual crisis energética, la inflación económica y la descontrolada migración, temas vinculados a la agenda globalista.

Precisamente, el asunto de la guerra, se ha convertido en la manzana de la discordia entre las florecientes derechas europeas que parecen divididas entre su apoyo o desacuerdo al Kremlin. Por un lado, Silvio Berlusconi, principal aliado de la flamante primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha manifestado estar a favor de levantarle las sanciones a Rusia, a diferencia de su socia derechista, quien ha mostrado una postura no tan favorable a la ofensiva Rusa, a la que califica de “invasión”. No obstante, el crudo invierno que se avecina en Europa podría cambiar su enfoque, al igual que el de las otras derechas patrióticas y conservadoras que empiezan a ganar terreno en el Viejo Continente.

A este tsunami derechista que golpea a Europa se suma la Agrupación Nacional de Marine Le Pen, en Francia; el partido Vox, en España, y el Partido de la Libertad de Austria, que hace poco mostró su apoyo a favor de levantarle las sanciones a Rusia, mostrándose cada vez más lejos de las políticas globalistas de la Unión Europea, al igual que Polonia, Hungría y Suecia, países que empiezan a tomar distancia de la agenda de la ONU contra la familia y su lobby LGBTI.  

Aunque todavía es prematuro pronosticar un desmoronamiento de la Unión Europea (alentado por la caída del euro, la inflación económica, el creciente desempleo, la inseguridad ciudadana, provocada por las políticas migratorias, impuestas por el derecho supranacional, en desmedro del derecho nacional) y un paulatino acercamiento al bloque integrado por China, Rusia y la India, lo cierto es que los artífices de la Agenda Mundial de la ONU, temen una posible alianza ideológica entre los disidentes de esta flamante derecha nacionalista y conservadora, y el bloque liderado por China y Rusia.

El invierno está próximo y todo parece indicar que esta navidad será diferente y traerá muchas sorpresas. Quizás en esta oportunidad, los europeos reciban a un Papá Noel chino que no llegará del norte, sino del oriente, cargado de regalos y gas ruso. 

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