Por: Abraham Fudrini
Escritor y comentarista político.
La clase política apenas sabe que el concepto “coyuntura” significa “momento” y que “momento” significa “coyuntura”, pero no es consciente y repite esta tautología sin analizar o comprender el concepto.
Hablar de “momento” es hablar de un tiempo corto, sin embargo ¿de dónde aparece ese “momento” o “coyuntura”?. Aparece de un tiempo largo, de un todo orgánico, de una permanencia estructural y tiene un comienzo y un fin. Este tiempo largo, orgánico, estructural, es el que produce muchos y diferentes “momentos” o “coyunturas”.
Podría escribir mucho sobre esta teoría y sus autores, sin embargo no es mi objetivo principal.
En Perú el inicio del tiempo largo, estructural (porque tiene una relativa permanencia), orgánico, comenzó después de la Segunda Guerra Mundial, cuando la demanda externa de productos producidos en Perú, era creciente y los precios realmente altos (azúcar, algodón, minerales, etc.). En este tiempo todavía predominaba la población rural sobre la urbana, Lima y otras ciudades eran provincias aún no modernas, la televisión recién llegó a Perú a fines de la década del 50 del siglo XX.
Podría decirse que desde 1950 en Perú se empieza a conformar una economía diferente a la anterior (primera mitad del siglo XX), moderna e industrial; que en 1959 ya tuvo por primera vez una ley propia: Ley de Promoción Industrial, después nació la Sociedad Nacional de Industrias, tiempo más tarde los exportadores se separaron y formaron su propia organización gremial: ADEX.
Este tiempo largo, estructural, orgánico nació y se conformó en la década del 50 del siglo XX y hasta hoy tiene algo más de 7 décadas. Durante este tiempo de la sociedad peruana ha habido crecimiento, relativo desarrollo, contradicciones fuertes y débiles, etc., entre estas últimas destacan algunas coyunturas que pusieron en cuestión, menos y más grave, la permanencia de una economía de mercado y después, a partir de la Constitución Política de 1979 (mantenida en la de 1993) de economía social de mercado.
Entre estas coyunturas que cuestionan la economía de mercado o social de mercado, destacan:
1) el Plan de Gobierno presentado en 1962 por el candidato Fernando Belaúnde y su mal gobierno entre 1963-1968;
2) el autodenominado Gobierno Revolucionario de las Fuerzas Armadas;
3) nuevamente el segundo gobierno de Fernando Belaúnde;
4) el primer gobierno de Alan García que extremando medidas estatistas o nacionalistas, pretendió nacionalizar la banca privada,
5) los menos o más proestatistas, proteccionistas y comunistas gobiernos de Martín Vizcarra, Francisco Sagasti y Pedro Castillo.
Lo primero que debe entender la clase política peruana es que las contradicciones, las crisis cada vez más graves, los problemas sociales, las reformas imprescindibles del Estado, la pobreza, el desempleo y otros fenómenos que no se han solucionado en más de 70 años y que los vivimos hoy, tienen imprescindiblemente que resolverse en los próximos 10 años, si no queremos ver en el futuro largo cómo la sociedad peruana se irá autodestruyendo.