Con sorpresa, indignación y rabia; ayer, a través del programa dominical PANORAMA, nos informamos de las cuitas dentro de Palacio, que el Presidente Castillo, activa delictiva e impunemente. Lamentable confirmar una vez más que la angurria y el afiebrado afán de llenarse los bolsillos, es la prioridad del Presidente y de su círculo, que ven al Estado como un botín, solo para satisfacer sus nefandos intereses. Nunca que recuerde en la historia de la República, que data de doscientos años, desde Palacio se ha dado este reprobable espectáculo. El propio Presidente de la República, reuniéndose con un proveedor, con el Gerente de Petroperú y una lobista, para allanar el camino de entregar a este empresario un servicio de más de 70 millones de dólares. Esta lamentable realidad no es imaginación graciosa de los adversarios del gobierno; es la evidencia, la huella indeleble dejada por los que participaron en este grotesco encuentro colusorio, para adjudicarse las obras de las entidades que administra el gobierno, en agravio de los intereses de todos los peruanos. Grave aún, es el silencio cómplice de la Fiscal de la Nación, su trayectoria deja claro, que responde a los designios del “lagarto” Vizcarra; que frustración saber que este miserable expresidente- que se vacunó primero-, al que se le imputa un cúmulo de fechorías, sabiendo lo que se le venía tomó algunos sectores importantes de las instituciones que administran justicia. La Junta Nacional de Justicia está tomada por este sujeto y el Ministerio Público con su silencio, le saca brillo al matrimonio siniestro con el lagarto. El Congreso tiene, ahora la responsabilidad de no dejar pasar este nefasto precedente, los hechos graves denunciados, merecen ser inmediatamente investigados y los responsables puestos tras las rejas, también hay que disponer la nulidad de ese contrato doloso; lo contrario sería premiar a un empresario sinvergüenza que no compite sino que se compra las licitaciones. Cuatro meses de gestión y Castillo y su entorno se han convertido en elementos más nocivos y peligrosos que la pandemia, organizan desde palacio encuentros entre proveedores y representantes de empresa para cotizar las obras y servicios más importantes; no tienen escrúpulos, es una banda como los “dinámicos del centro” aliados estratégicos, que apoyaron el rechazo a la vacancia, lo que si queda claro a estas alturas, es que el robo y el dispendio de las arcas públicas son las prioridades de estos vende patrias, que acaban con la ilusión de millones de peruanos que se comieron el embuste de este maestro que mancha con indignidad esta noble profesión. Por último, el pueblo, la democracia y sus Instituciones que son el vehículo por el que se atiende a los ciudadanos; está gravemente afectada, lo que se conoce de este luctuoso suceso en Palacio, no solo envilece a quien es su ocupante precario, sino todo el sistema está en peligro, ya no solo hay que pensar en la vacancia, sino mecanismos que nos permita sincerar la realidad, el Congreso debe revisar las causales por las cuales los Presidentes deben ser acusados, la democracia no se puede atar de manos, e impedir que el pretexto de la Fiscalía, que no puede hacer más que investigar porque no lo puede acusar ni menos promover una sentencia que acabe ejemplarmente con este enemigo de la democracia; sí por menores cosas se decreta la muerte civil de funcionarios de bajo rango, grave aún más, es este mal ejemplo de un Presidente que ha sido muy eficaz de manchar la Institución presidencial y de poner en peligro la viabilidad de la Nación.
Milagros Salazar De La Torre.