El domingo 07 de diciembre se llevaron a cabo las Elecciones Primarias (modalidad por delegados) de 37 organizaciones políticas que definieron a sus candidatos para las Elecciones Generales 2026 (EG 2026). Así, según datos oficiales de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), fueron un total de 1206 delegados de todas las agrupaciones los que fueron distribuidos en 77 mesas de votación y 31 locales en 30 distritos a nivel nacional, para llevar a cabo este proceso.
Problemas de último minuto
Ahora bien, es importante precisar que en apenas 5 partidos la elección primaria por delegados presentó una dosis de incertidumbre al haberse presentado más de una plancha o lista presidencial. Este fue el caso de las organizaciones PRIMERO LA GENTE, PRIN, PARTIDO MORADO, SALVEMOS AL PERÚ y ACCIÓN POPULAR.
Asimismo, corresponde señalar que a escasos días de estas elecciones primarias 3 partidos presentaron problemas de último minuto. Primero, el Poder Judicial ordenó la suspensión de la elección por delgados del partido AHORA NACIÓN. Segundo, Phillip Butters, conocido periodista, decidió renunciar a su precandidatura con AVANZA PAÍS. Y, por último, reconocidos militantes de ACCIÓN POPULAR presentaron denuncias de fraude al interior de dicho partido destinado a favorecer la precandidatura de Alfredo Barnechea.
Resultados predecibles
Por lo expuesto, diversos analistas señalaron que si bien podrían presentarse algunas sorpresas lo cierto es que en el caso de la inmensa mayoría de las organizaciones los resultados eran absolutamente predecibles. Ello es así porque 32 partidos definieron sus candidaturas entre las listas únicas que han presentado, tal es el caso de partidos como FUERZA POPULAR (Keiko Fujimori), ALIANZA PARA EL PROGRESO (César Acuña), FRENTE DE LA ESPERANZA (Fernando Olivera), PAÍS PARA TODOS (Carlos ÁLVAREZ) y otras 28 agrupaciones en donde el panorama fue el mismo.
Los que compitieron
Sin embargo, como ya lo indicamos, encontramos a 5 agrupaciones en las que sí hubo una competencia interna entre dos o más listas presidenciales. En esa línea, una de las organizaciones donde se disputó la candidatura fue PRIMERO LA GENTE. Este partido presentó formalmente tres planchas presidenciales. Una encabezada por Marisol Pérez Tello, otra por Miguel del Castillo y la tercera por Carlos Oré Gamboa.
Una situación análoga se presentó en el PARTIDO MORADO. La organización inscribió como precandidatos a la presidencia a Mesías Guevara, Richard Arce y Manuel Quiroz. Lo mismo ocurrió en el PRIN con las listas encabezadas por Liliana Humala y Walter Chirinos. Por su lado, en la agrupación SALVEMOS AL PERÚ -que tuvo el mayor número de listas presidenciales- compitieron 5 precandidatos: Antonio Ortiz, Mariano Gonzalez, Ricardo Velásquez, David Mamani y Ramiro Málaga.
Las primarias como ficción
A la luz de lo expuesto, teniendo en consideración el panorama descrito cabría preguntarnos lo siguiente: ¿Este tipo de elecciones primarias mejoran la representatividad de las candidaturas? La respuesta es no. Como lo señala el profesor y ex jefe de la ONPE, Fernando Tuesta: “Más allá de alguna noticia sobre un candidato ganador o un conflicto entre varios, la realidad es desalentadora. Es la consecuencia de una práctica poco democrática y de una legislación ineficaz que privilegia la selección de candidatos en manos de muy pocos”.
¿Cómo llegamos a este escenario?
En esa línea, habría que recordar que durante muchos años hasta antes de las Elecciones Generales 2006, la selección de candidatos era una práctica privada (exclusiva y excluyente) de cada partido. La Ley N° 28094, Ley de Partidos Políticos (hoy denominada de “organizaciones políticas”), publicada en 2003, fijó tres modalidades de selección de candidaturas: abierta, directa y por delegados. ¿Qué pasó durante ese tiempo? Casi todos los partidos prefirieron la modalidad por delegados pues es la que mayor ventaja les otorgaba a las cúpulas. El problema es que este tipo de elecciones han tenido siempre baja participación y los propios militantes han sido quienes han cuestionado la legitimidad de los resultados.
Tiempo después, recién en 2019, para corregir dicha situación, el Congreso de la República modificó la Ley de Organizaciones Políticas estableciendo como única modalidad de selección de candidaturas a las denominadas PASO (Elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias). Estas PASO -al ser abiertas y obligatorias (como una elección general) - elevaría el porcentaje de participación (más del 70% del padrón electoral nacional en promedio) dándole mayor legitimidad a los resultados. Además, las PASO promoverían la competencia interna (optando por candidaturas individuales y no por lista única) y acabaría con los “partidos fantasmas” pues las agrupaciones perderían su inscripción si no superaban el umbral mínimo de votos que la ley exigía.
El retroceso
Como se sabe, las PASO presentan reglas de juego que exigen mayores niveles de organización e institucionalidad a los partidos. Diversos estudios indicaban que la mayoría de partidos no sería capaz de superar la valla electoral y, por tanto, dicho umbral se encargaría de acabar con las organizaciones de fachada, vientre de alquiler o fantasmas, como quieran llamarlas. Por eso motivo, el Congreso de la República (2021-2026) suspendió la realización de las PASO en 2021 y 2002, para finalmente, eliminarlas en 2023.
¿Qué trajo consigo la eliminación de las PASO?
Con la eliminación de las PASO vimos de vuelta a las tres modalidades que la Ley de Organizaciones Políticas había fijado en 2003: abierta, directa y por delegados. Así, para estas EG 2026 ninguna de las 39 agrupaciones eligió la modalidad abierta (la más parecida a las PASO). Solo 2 organizaciones (el APRA y RENOVACIÓN POPULAR) optaron por la directa (un militante un voto). Los otros 37 partidos eligieron la modalidad por delegados (pero en apenas 5 hubo más de una lista presidencial compitiendo internamente). En otras palabras, de las 39 agrupaciones que participarán en las EG 2026 en 32 de ellas las candidaturas ya estaban decididas convirtiendo a las elecciones primarias en una auténtica farsa que únicamente busca cumplir un formalismo absurdo que no sirve para absolutamente nada en términos de representatividad, legitimidad y participación.
Si ello es así, es preferible, como también lo señala el profesor Tuesta que “sinceremos la realidad creada por este Congreso y que los partidos se organicen privadamente e inscriban directamente a sus candidatos como antes. Así se ahorra tiempo y dinero público mal empleado, ya que, en un sistema saturado de organizaciones sin vida interna, insistir en primarias que no generan competencia ni participación solo prolonga la ficción de que existen partidos reales”.
Apunte final
Por último, queda claro que este tipo de elecciones primarias que no son otra cosa que una ficción debe ser corregida. Primero, porque hoy la ONPE, a pesar de haberse eliminado las PASO, está obligada por ley a distribuir cerca de 5 millones de soles para darle acceso a redes y medios a los partidos que participaron en estas elecciones primarias ficticias (recordemos que 32 de 37 organizaciones presentaron lista única presidencial). Ello es así porque sin las PASO el público objetivo ya no es la ciudadanía en general, sino apenas 1 millón de militantes para un universo de 39 organizaciones, con lo cual nuestro modelo de financiamiento público (que tenía como base a unas PASO, primero suspendidas y luego eliminadas) pierde eficacia y desperdicia recursos que perfectamente podrían ser utilizados para cubrir otras necesidades.
Y, segundo, porque como le hemos señalado en la columna anterior: “las elecciones primarias promueven la democratización interna de los partidos solo cuando se hacen con una vocación real y no como una mera formalidad para cumplir con lo que la ley manda. Decimos ello porque una cosa es celebrar una elección primaria en la que participa toda la militancia pudiendo elegir entre opciones competitivas que pugnan entre sí (como ha ocurrido en el APRA) y otra, muy diferente, es ir a una elección primaria en la que una minoría de los militantes (los delegados) debe santificar a la lista única presentada por la cúpula partidaria”[1].
[1] Rodríguez Campos, Rafael. “Elecciones primarias: El APRA y Renovación Popular”. Publicado el 03 de diciembre en MAZMEDIATV.COM https://mazmediatv.com/elecciones-primarias-el-apra-y-renovacion-popular/