Renuncia inevitable o vacancia de Castillo

El paso al costado del Presidente Castillo, que todos los sectores incluidos los que hasta hace algunos días volteaban la cara para no ver el desmoronamiento del sistema político y de la grave afectación de la vida de los peruanos; hoy resulta inevitable. Si hay algo por la que los peruanos recordarán al Presidente Castillo será, por haber fraguado esta extensa unanimidad en el país que grita su renuncia. Castillo no tiene derecho a seguir un día más al frente del país sus actos complican cada día la vida de los peruanos de a pie. Resulta irresponsable que habiendo declarado que no está preparado para ser Presidente, pretenda continuar conduciendo la nave de un país con 32 millones de habitantes exponiéndolos a peligro permanente. Castillo ha desvestido y puesto en evidencia la precariedad de una izquierda frívola que ha sobrevivido en el país, en la cómoda posición de penetrar el Estado con asesorías y consultorías sin rendir cuenta a nadie. En, seis meses de gobierno, El Presidente ha tenido que licenciar tres Presidentes del Consejo de Ministros, designados por él; sin el más mínimo criterio de razonabilidad, como ha dicho en una entrevista que no está preparado para el cargo, estas decisiones han reflejado esa precariedad, desde vinculados a la horda criminal de sendero luminoso y misóginos como Bellido, hasta anti mineros como Mirtha Vásquez, que se caracterizó por ser una eficiente sepulturera de los desarrollos mineros, parecía ser que eran unas inteligencias artificiales para destruir todo lo que encontraban a su paso, la institucionalidad democrática y la economía han sido sus víctimas. Si a esto agregamos, que nombró Ministros como Barrenzuela en Trabajo, guerrilleros en Relaciones exteriores como Béjar y prosenderistas en educación, que salieron expulsados por la presión ciudadana; patética y destructiva es la gestión de este señor que encandiló a la mayoría de los peruanos ofreciendo convertir nuestro país en un edén. Este relato siniestro no es lo más grave, sus allegados han asaltado los cargos más importantes de las instituciones y empresas estratégicas del país como Petro Perú, INDECOPI, Perú Petro, en los pocos meses hemos apreciado con sorpresa, como han desplazado a funcionarios de carrera, gente prontuariada, que lo primero que han hecho es horadar los fondos públicos, medrar el cauce normal del desarrollo y aporte de estas instituciones a nuestro país. Las “lobistas”, se han convertido en las piezas tutelares de estas instituciones, donde la inmoralidad y la corrupción, han mostrado lo más nítido de su entraña gansteril. Lo de Bruno Pacheco, resulta ser una anécdota frente al descaro como en los diversos sectores, los “pobres” que apoyaron a Castillo se aprestan a ser ricos en el breve tiempo. Por último, el reciente gabinete Ministerial fallido, ha reflejado la incapacidad punible de Castillo, tiene claro que no puede ir más en la conducción del país, y este gabinete lo nombró para que lo protejan, tomó el Ministerio del Interior para desactivar en la Policía Nacional las unidades de investigación que le siguen los pasos por los graves actos de corrupción perpetrados en palacio y borrar los rastros de las licitaciones dolosos festinadas en PETROPERU, por orden expresa de su despacho. Los peruanos casi unánimemente han rechazado la ofensa a su inteligencia, cuando Castillo ha dicho que no sabía que una “lobista” había celebrado el cumpleaños de su hija en palacio. El Perú ya tiene claro el diagnóstico de esta metástasis que ataca gravemente su moral, se llama Castillo, es más voraz y dañino que el Covid19, no se resuelve convocando a los “mejores cirujanos” de la izquierda, la única solución de salvación Nacional es su Renuncia. Castillo, resistirá porque sabe que le espera la cárcel, ante tamaña indignidad, el Congreso tiene que acudir con prontitud a sala de operaciones. Milagros Salazar De La Torre.